Convencido de que el recuerdo lo guarda todo y no solamente a las Albertinas y a las grandes efemérides del corazón y los rincones…
Entiendo que Cortázar se refiere con esto a la Congregación de las Hermanas Albertinas, que pertenecen a las congregaciones franciscanas, que tratan de realizar el ideal de radicalidad evangélica. La caracteriza el afecto al misterio de la Encarnación, que se expresa más profundamente en el símbolo del Pesebre, en la Cruz y en Eucaristía, así como amor a la pobreza y al servicio a los pobres. El santo Hermano Alberto se conmovió profundamente con el amor del Redentor sufriente y lleno de agradecimiento por su dolor de Su Pasión entregó su vida en el servicio a los hermanos mas pequeños de Cristo.
Tras el ejemplo y enseñanzas del santo Hermano Alberto y de la beata Hermana Bernardina, la albertina abraza con la veneración particular y con amor de hijos a la Santísima Virgen, invocando su ayuda e imitando sus virtudes. La riqueza de la Congregación es el ejemplo y la interseción del santo Hermano Alberto y de la beata hermana Bernardina, ella antes de morir ordenó a las hermanas: hagan el bien a todos.
Fuente: Las Albertinas.
Ya no sé si son los riñones o rincones!
1.No esta haciendo referencia a ninguna congregación religiosa femenina sino a Albertine Simonet, personaje destacado de À la recherche du temps perdu. Ya es citada en el primer libro, Du côté de chez Swann, como una de las chicas de Combray a las que el narrador recuerda como les jeunnes filles en fleur que perturban su líbido. Pero es a partir del segundo de los libros, À l’ombre des jeunes filles en fleurs, que Albertine pasa a ser el principal personaje femenino de los recuerdos que constuyen el relato.
2. "Riñones", naturalmente. "Riñones" es lo que dice en la primera edición, y "rincones" carece de sentido. Hay más errores en la transcripción que usas. Me ofrezco a corregirlos, ya que tu blog merece lo mejor de lo mejor.
Obviamente es referido a qué Albertina es el gran amor del narrador, en la novela de Marcel Proust. Albertina disparue apareció en 1925.